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martes, 24 de mayo de 2016

BRIZNAS (Saiz de Marco)

EN AGOSTO DE 1914 el ejército alemán abrió el frente occidental invadiendo Bélgica y Luxemburgo. La fuerza de avance fue contenida drásticamente en la primera batalla del Marne. Los taxis de París ayudaron a trasladar a los soldados franceses. El equilibrio de fuerzas impuso la estabilización del frente. Los contendientes se atrincheraron en una línea sinuosa de posiciones fortificadas, que permaneció sin cambios sustanciales durante casi toda la guerra. La combinación de las trincheras, los nidos de ametralladoras, el alambre de espino y la artillería infligían cuantiosas bajas a unos y otros.

LA MATERIA OSCURA desempeña un papel central en la formación de estructuras y en la evolución de las galaxias, y tiene efectos en la anisotropía de la radiación del fondo de microondas. Sólo aproximadamente el 5% de la densidad de energía total en el universo puede observarse directamente.

Todas las estrellas, galaxias y gas observables forman menos de la mitad de bariones, y se cree que esta materia puede estar distribuida en filamentos gaseosos de baja densidad, formando una red por todo el universo en cuyos nodos se encuentran los cúmulos de galaxias.

EL 1 DE septiembre de 1939 Alemania invadió Polonia, usando el pretexto de un ataque polaco simulado en un puesto fronterizo. Alemania avanzó usando la “guerra relámpago”. El Reino Unido y Francia le dieron dos días para retirarse de Polonia. Pasada la fecha límite, el Reino Unido, Australia y Nueva Zelanda declararon la guerra a Alemania, seguidos rápidamente por Francia, Sudáfrica y Canadá.

LA GRAVEDAD DE un agujero negro provoca una singularidad envuelta por una superficie cerrada, llamada “horizonte de sucesos”. Éste separa la región del agujero negro del resto del universo, y es la superficie límite del espacio a partir de la cual ninguna partícula puede salir.

Se cree que en el centro de la mayoría de las galaxias hay agujeros negros supermasivos. La gravedad del agujero negro puede atraer al gas que se encuentra a su alrededor, el cual se arremolina y calienta a temperaturas de hasta 12 millones de grados, esto es, unas 2000 veces la temperatura del sol.

MENOS DE 24 horas después del ataque sobre Pearl Harbour, Japón invadió Hong Kong. Poco después fueron invadidas Filipinas y las colonias británicas de Malasia, Borneo y Birmania, con la intención de apoderarse de los campos petrolíferos de las Indias Holandesas. Aproximadamente 130.000 hombres de la Commonwealth británica fueron recluidos en los campos de concentración japoneses.

TRAS LA EXTINCIÓN total de la energía de una “gigante roja” (estrella de gran masa), la fuerza gravitatoria comienza a ejercer presión sobre sí misma originando una masa concentrada en un pequeño volumen, convirtiéndose en una “enana blanca”. Este proceso puede seguir hasta el colapso de la estrella por su autoatracción gravitatoria, convirtiéndose en un agujero negro.

GUAM FUE INVADIDA el 21 de julio de 1944. Los japoneses lucharon fanáticamente. Las operaciones de limpieza continuaron mucho tiempo después de que la batalla de Guam hubiese acabado. La isla de Tinian fue invadida el 24 de julio. En esta operación se usó por primera vez napalm en una guerra.

Las tropas del general MacArthur liberaron las Filipinas. Los japoneses habían dispuesto una defensa a toda costa y usaron los últimos restos de sus fuerzas navales para hacer frente a la invasión. Fue la primera batalla en que emplearon ataques kamikazes.

Iwo Jima fue conquistada en febrero. La isla estaba fuertemente defendida con multitud de túneles, trincheras y fuertes bajo tierra, pero fue ocupada por los Marines después de tomar el monte Suribachi.

SE ESTIMA QUE existen más de cien mil millones de galaxias en el universo observable. La mayoría de ellas tiene un diámetro entre cien y cien mil parsecs y están generalmente separadas por distancias del orden de un millón de parsecs.

El espacio intergaláctico está compuesto por un tenue gas cuya densidad media no supera un átomo por metro cúbico.

La mayoría de las galaxias están dispuestas en una jerarquía de agregados, llamados cúmulos, que a su vez pueden formar agregados más grandes, llamados supercúmulos. Estas estructuras mayores están dispuestas en hojas o filamentos rodeados de inmensas zonas de vacío.

EL PRINCIPAL LÍDER de los Jemeres Rojos, que tomó por nombre Pol Pot, creó centros de reclusión con el fin de buscar al “enemigo oculto” dentro del Partido y continuar su política de exterminio de cuanto consideraba atentatorio hacia el Estado. El más activo fue el de Tuol Sleng. Salvo los altos mandos nadie sabía qué ocurría allí, pero los campesinos que vivían cerca los llamaban “el sitio donde se entra pero no se sale”. Solamente siete de las 20.000 personas que fueron llevadas para ser “interrogadas” sobrevivieron. Los sospechosos lo eran por razones tan sutiles como usar gafas, conocer un idioma extranjero o tener un título universitario. Tras ser declarados culpables en casi todos los casos, los sospechosos eran condenados a la pena capital, conduciéndoseles a los campos de exterminio. Las ejecuciones se hacían generalmente por contusiones o armas blancas para ahorrar munición. Las víctimas eran aproximadas al borde de la fosa y asesinadas. Para ahogar sus gritos y llantos se colocaba un equipo de sonido con música a todo volumen.

LA VÍA LÁCTEA forma parte de un conjunto de unas 40 galaxias llamado Grupo Local, y es la segunda más grande y brillante tras la galaxia de Andrómeda.

El Sistema Solar se encuentra en el brazo Orión de la Vía Láctea, que forma parte del brazo espiral de Sagitario.

Los brazos son ondas de densidad que se desplazan independientemente de las estrellas contenidas en la galaxia. El brillo de los brazos es mayor porque allí se encuentran las “gigantes azules”, que son las únicas que pueden ionizar grandes extensiones de gas.

LOS HUTUS INTENTARON socavar el poder de los tutsis para lograr un mejor reparto de las tierras. Un incidente en noviembre de 1959 entre jóvenes tutsis y un líder hutu se convirtió en la chispa de una revuelta popular, en la cual los hutus quemaron propiedades tutsis y asesinaron a varios de sus dueños.

En los dos años siguientes unos 20.000 tutsis murieron asesinados.

En 1972, en el vecino Burundi, 350.000 hutus murieron víctimas de los tutsis.

En 1994 el avance del Frente Patriótico Ruandés desencadenó una multitud de masacres contra los tutsis obligando a un desplazamiento masivo de personas hacia campos de refugiados situados en las fronteras.

En agosto de 1995 tropas zaireñas intentaron expulsar a estos desplazados hacia Ruanda. Más de 800.000 personas fueron asesinadas. Casi todas las mujeres que sobrevivieron al genocidio sufrieron violaciones múltiples y muchos de los 5000 niños nacidos de esas agresiones fueron asesinados.

EL MARCO EN que se mueven las cuerdas no es el aparente de cuatro dimensiones temporo-espaciales, sino un escenario en que a las cuatro dimensiones de espacio y tiempo se añaden otras dimensiones compactificadas. Presumiblemente existen una dimensión temporal, tres dimensiones espaciales ordinarias, y siete dimensiones compactificadas imperceptibles para nosotros.

EN OPINIÓN DE Einstein, la realidad que captamos es una especie de ilusión persistente. En tal caso, desconocemos por qué no es una ilusión dulce, ni blanda, ni sencilla.

52 comentarios:

  1. Miguel Gaya / Himnos de la batalla vencida

    I

    Empujando la carreta donde van los heridos
    alejándose del campo de batalla, de la historia
    y de todo recuerdo
    el médico con su guardapolvos embarrado
    bufa y grita y golpea los caballos y los ayudantes
    y algún herido que ha bajado del carromato a ayudar
    porque ama los hombres
    que lleva de cualquier modo, algunos moribundos, otros
    quejándose a gritos o llorando quedo,
    y los lleva como si sobre sus hombros los llevara
    porque le han encargado que los salve
    a él, que nunca hizo nada, ni les dijo ni les pidió ni les mandó
    que fueran allá, donde la batalla arrecia
    y los muertos se apilan, y se apilan los heridos
    en espera del médico
    que debe sacarlos de allí
    a toda prisa
    para salvar acaso uno, o dos, cualquiera,
    cuando haya tiempo
    de mirarlos.

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  2. No se puede ganar una guerra, como no se puede ganar un terremoto .

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  3. Todo el que crea y siembra, es más que algo. Todo el que crea y siembra, es algo Dios.

    (MIGUEL HERNÁNDEZ)

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  4. Viejo es el viento y todavía sopla».

    (DURÁN)

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  5. LA inteligencia busca.
    EL corazón encuentra.

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  6. Y así, de un mundo débil y una existencia torpe nace, breve, el amor.

    (FRANCISCO BRINES)

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  7. Del otro lado de mí, por detrás de donde yazgo, el silencio de la casa alcanza el infinito. Oigo caer el tiempo, gota a gota, y ninguna gota de las que caen se oye caer. El corazón físico me oprime físicamente la memoria, reducida a nada, de todo cuanto fue o fui.



    Siento la cabeza materialmente colocada en la almohada donde la tengo formando un valle. La piel de la funda mantiene con mi piel un contacto de personas en la sombra.



    La oreja misma, sobre la que me apoyo, se me graba matemáticamente contra el cerebro. Pestañeo de cansancio, y mis pestañas producen un sonido muy leve, inaudible, en la blancura sensible de la almohada erguida.



    Respiro, suspirando, y mi respiración aparece —no es mía. Sufro sin sentir ni pensar. El reloj de la casa, lugar exacto allá al fondo de las cosas, da las medias secas y nulas. ¡Todo es tanto, todo es tan hondo, todo es tan negro y frío!



    Atravieso tiempos, atravieso silencios, mundos sin forma pasan a través de mí.



    Súbitamente, como un niño del Misterio, un gallo canta ignorando la noche. Puedo dormir, porque es mañana en mí. Y siento que mi boca sonríe, corriendo levemente los suaves pliegues de la funda que se me engancha al rostro. Puedo abandonarme
    a la vida, puedo dormir, puedo ignorarme… Y, a través del sueño nuevo que me oscurece, o recuerdo el gallo que cantó, o es él, realmente, quien canta por segunda vez.

    (PESSOA)

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  8. Los campos son más verdes en el decirlos que en su verdor. Las flores, si se describen con frases que las definan en el aire de la imaginación, tendrán colores de una permanencia que la vida celular no permite.

    (PESSOA)

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  9. No sólo quien nos odia o nos envidia
    nos limita y oprime; quien nos ama
    no menos nos limita.
    Que los dioses me concedan que, despojado
    de afectos, tenga la fría libertad
    de los pináculos sin nada.
    Quien quiere poco tiene todo; quien quiere nada
    es libre; quien no tiene, y no desea,
    hombre, es igual a los dioses.

    (PESSOA)

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  10. Enrique Bacigalupo5 de julio de 2021, 9:13

    Ven hasta mí, belleza silenciosa,

    talismán de un planeta no vivido,

    imagen del ayer y del mañana

    que influye en las mareas y los versos;

    ven hasta mí y tus labios y tus ojos

    y tus manos me salven de morir.



    (GIMFERRER)

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  11. EL CINE DE LOS SÁBADOS


    maravillas del cine galerías
    de luz parpadeante entre silbidos
    niños con sus mamás que iban abajo
    entre panteras un indio se esfuerza
    por alcanzar los frutos más dorados
    ivonne de carlo baila en scherezade
    no sé si danza musulmana o tango
    amor de mis quince años marilyn
    ríos de la memoria tan amargos
    luego la cena desabrida y fría
    y los ojos ardiendo como faros

    (MARTÍNEZ SARRIÓN)

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  12. Indiferente
    a lo que en ella pasa,
    gira la Tierra.

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  13. Enrique Bacigalupo11 de julio de 2021, 14:01

    Me registro los bolsillos desiertos
    para saber dónde fueron aquellos sueños.
    Invado las estancias vacías
    para recoger mis palabras tan lejanamente idas.
    Saqueo aparadores antiguos,
    viejos zapatos, amarillentas fotografías tiernas,
    estilográficas desusadas y textos desgajados del Bachillerato,
    pero nadie me dice quién fui yo...

    ¿En qué escondidos armarios
    guardan los subterráneos ángeles
    nuestros restos de nieve nocturna atormentada?
    ¿Por qué vertientes terribles se despeñan
    los corazones de los viejos relojes parados?
    ¿Dónde encontraremos todo aquello
    que éramos en las tardes de los sábados,
    cuando el violento secreto de la Vida
    era tan sólo
    una dulce campana enamorada?
    Pues yo registro los bolsillos desiertos
    y no encuentro ni un solo minuto mío,
    ni una sola mirada en los espejos
    que me diga quién fui yo.

    (MIGUEL LABORDETA)

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  14. MUERTE DE UN NATURALISTA

    Todo el año el barrial que empapaba el lino ulceraba en el corazón
    el pueblo; verde y pesado
    el lino se había podrido ahí, aplastado por enormes terrones.
    achicharrado a diario bajo el severo sol.
    Las burbujas hacían gárgaras delicadamente, las moscas azules
    tejían una poderosa gasa de sonido alrededor del olor.
    Había libélulas, mariposas moteadas,
    pero lo mejor de todo era la baba cálida y espesa
    de los huevos de rana que crecían como agua coagulada
    a la sombra de las orillas. Allí, cada primavera
    yo llenaba tarros de mermelada con las gelatinosos
    manchitas para ordenarlos en los alféizares de casa,
    o en los estantes de la escuela, y esperaba y observaba hasta que
    aquellos puntos engordaban y explotaba en ágiles
    renacuajos nadadores. Miss Walls nos explicaba por qué
    la rana papá se llamaba rana toro
    y cómo croaba, y por qué la mamá rana
    ponía cientos de huevecillos que eran los
    huevos de la rana. Podías predecir el tiempo por las ranas también,
    porque se ponían amarillas con el sol y marrones
    con la lluvia.

    Luego, un día caluroso, cuando los campos hedían
    a bosta de vaca entre el pasto, las ranas airadas
    invadieron el barrial; me agaché entre los setos
    atraído por un rudo croar que no había oído
    antes. El aire estaba denso por un coro de bajos.
    Justo bajo la presa había ranas panzonas alerta
    sobre los terrones; sus cuellos flojos se hinchaban como velas. Algunas saltaban:
    los chapoteos y hundimientos eran obscenas amenazas. Algunas quietas,
    serenas como granadas de lodo, con sus cabezas chatas, pedorreaban.
    Sentí náuseas, me di vuelta y corrí. Los grandes reyes del limo
    se habían reunido allí para vengarse, y yo sabía
    que si hundía la mano, los huevos la atraparían.

    (SEAMUS HEANEY)

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  15. Enrique Bacigalupo14 de julio de 2021, 12:52

    Las cosas que había aquí antes de tu muerte

    y las cosas que han venido después:



    A las primeras pertenecen en primerísimo lugar

    tu ropa, joyas y fotografías

    y el nombre de aquella por la que te bautizaron

    y que también murió joven.

    Pero también un par de facturas, la decoración

    de un rincón particular de la habitación,

    una camisa que me planchaste

    y que guardo con todo cuidado

    debajo del montón de camisas,

    ciertas piezas musicales y el perro sarnoso

    histérico que siempre se está levantando

    y riéndose estúpidamente como si estuvieras aquí.



    A las segundas pertenecen mi nueva estilográfica,

    un perfume bien conocido

    sobre la piel de una mujer a la que apenas conozco

    y la nueva bombilla que puse en la lámpara de la cama

    a cuya luz leo sobre ti

    en todos los libros que trato de leer.



    Las primeras me recuerdan que exististe.

    Las últimas, que ya no existes.



    En esta casi inexistencia de diferencia

    la que encuentro difícil de soportar.


    (Henrik Nordbrandt)

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  16. Me imaginaba al viento

    sin arbustos ni árboles

    y al sol sin nuestra piel


    entonces te vi andando con los brazos

    separados del cuerpo como si

    fueses a abandonar la tierra

    como si probases el viento


    detrás de las montañas a lo lejos tenía

    que estar el mar en alguna parte

    pero no lo vimos


    y pensé que todo tenía ser así

    el profundo azul del cielo

    y nuestras sombras púrpuras

    sobre la nieve


    (MIRIAM VAN HEE)

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  17. TENGO un epitafio:

    "Así está bien."

    Lo cuido,
    crece como hierba.

    Lleva una lluvia dentro
    y viento
    con risas de niño.

    Juega a mi alrededor.

    Es extraño.

    No sé.

    Lo más alegre
    que he escrito triste.

    (JOSÉ ALCARAZ)

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  18. Enrique Bacigalupo16 de julio de 2021, 7:43

    Llevo tu ropa
    que mi cuerpo llena,
    me asombro de lo bien que me sienta,
    la ropa se asombra también
    como si tú misma hubieras regresado-
    Dulce confusión,
    destinada a ocultar
    la semilla que ha perdurado siglo tras siglo.
    Llevo tu ropa por las calles en las que tú has creído.
    Hazme creer a mí también,
    deja que tu luz me encienda.
    Las prendas se mueven por sí solas
    dejando entrever por las costuras
    el resplandor de la semilla
    que ha pasado de un siglo a otro.

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  19. Enrique Bacigalupo16 de julio de 2021, 7:44

    (ANA BLANDIANA)

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  20. Un mundo del que entiendo tan poco:
    las palabras me envuelven
    de niebla y nubes-
    en contadas ocasiones algún lucero
    con los bordes deshechos
    intenta introducir un rayo de sentido.
    Todo se encuentra
    demasiado lejos,
    cuando no demasiado cerca,
    las lentes son siempre inadecuadas,
    las formas no figurativas,
    sin sabor, ni olor,
    sólo los dedos perdidos
    sobre la áspera superficie
    del universo.

    (ANA BLANDIANA)

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  21. ERA mi libro favorito.
    Era un regalo de mi padre
    lleno de gráficos y epígrafes,
    fotografías en color
    de máscaras, de buceadores
    en el antártico, entre nubes
    de krill; de esquirlas de cristal,
    de ocelos y cefalotórax
    vistos con microscopio cien
    veces más grandes, e indecibles,
    como lo que sentía con:
    y los árboles se volvieron
    piedra, escrito junto al fósil
    en el que me costaba un poco
    dar con el árbol. O al llegar
    a lo de la partenogénesis.
    o al tratar de entender qué fue
    lo que llevó a las procariotas
    a fagocitar otras células,
    y a convertirse en eucariotas,
    inaugurando la noción
    misma de vida, separando
    lo vivo y lo inerte en el mar
    primordial.

    ¿Fue de mutuo acuerdo,
    la carencia de núcleo y de
    membrana respectivamente?
    ¿O el hambre sin más y la lucha
    por la supremacía? ¿Fue
    un acto rutinario, ciego,
    o una singularidad? ¿Cómo
    se llega a ser nosotros?

    Qué hacemos aún allí,
    mi padre y yo, sin responder;
    yo con mi libro favorito,
    él con mi vida por delante;
    los dos mirando al infinito
    más próximo, no con nostalgia,
    sino con nuestra única certeza:
    que no nacemos, no morimos
    sólo nos separamos.

    (ABRAHAM GRAGERA)

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  22. ÍTACA

    El amado no
    necesita estar vivo. El amado
    vive en la cabeza. El telar
    es para los pretendientes, encordado
    como un arpa con el hilo blanco de un sudario.

    Él era dos personas.
    Era el cuerpo y la voz, el sencillo
    magnetismo de un hombre vivo, y también
    el desplegado sueño o imagen
    a los que da forma la mujer que trabaja el telar,
    que se sienta ahí en un salón lleno
    de hombres sin imaginación.

    Igual que le tienes lástima
    al engañado mar que intentó
    llevárselo para siempre
    y solamente se llevó al primero,
    al verdadero marido, debes
    tenerle lástima a estos hombres: no saben
    lo que están mirando;
    no saben que cuando uno ama de esta forma
    un sudario se convierte en un traje de novia.

    (LOUISE GLÜCK)

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  23. Amé. Es incomprensible como el temblor de los árboles.
    Ahora estoy extraviado en la luz pero yo sé que amé.
    Yo vivía en un ser y su sangre se deslizaba por mis venas y
    la música me envolvía y yo mismo era música.
    Ahora,
    ¿quién es ciego en mis ojos?
    Unas manos pasaban sobre mi rostro y envejecían dulcemente. ¿Qué
    fue existir entre cuerdas y espíritus?
    ¿Quién fui en los brazos de mi madre, quién fui en mi propio corazón?
    Es extraño:
    solamente he aprendido a desconocer y olvidar. Es extraño:
    ahora, el amor
    habita en el olvido.

    (GAMONEDA)

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  24. CARNE somos, Menfis
    ríos de sangre
    recorren el alma;
    en sus frágiles alas nos llevan
    de un lugar a otro.
    Fuertes en el amor
    contemplamos el mundo.
    Mas qué poco somos
    cuando este nos abandona.
    Ícaros de nuestros sueños,
    nuestras alas se derriten,
    y un abismo sin fin
    nos abre sus fauces,
    en una caída sin retorno.

    (ANTONIO SOTO)

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  25. Creemos ser seres, pero en verdad somos estares.

    (RAFAEL BALDAYA)

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  26. Isidoro Capdepón19 de julio de 2021, 5:25

    Ha llegado el invierno
    a la casa del monte, y ha venido
    apretado en la piña
    de mi última niñez, la gratitud.

    Me miraba en el fuego, vi pagadas
    mis deudas, no encontré
    tampoco a mis deudores, cuando allí,
    junto a la chimenea, entre una sombra
    y una lengua de llama,
    se me dio todo junto a manos llenas.

    Aquello -yo no sé
    llamarlo sino aquello solamente-
    estaba tan ardiendo con el fuego,
    tan abrazado al fin
    de todos los finales, que empezó
    a no tener principio ya la noche.

    ¿Quién miraba a los ojos
    a quién en ese pozo de ser uno
    mi corazón, la vida?

    Y no quise saber, pero era cierto:
    entró la casa en luna, algo temblaba.

    (VICENTE GALLEGO)

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  27. El interés desea vestirse de altruismo, la mentira de verdad y la fuerza de justicia: el canalla solo prospera gracias a su amplio armario de disfraces.

    (NEORRABIOS@)


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  28. Se hace tarde muy temprano.

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  29. SOBRE mi cama
    qué postizo
    y qué afín
    tu cadáver. Virginia.

    No era carne en alerta
    ni espíritu en reposo.

    No lo toqué, no quise.
    ¿Qué podía decirle
    a un no-tú tan absurdo?

    Pero sí, lo comprendo,
    ya es difícil morir
    como para ocuparse
    de que el cadáver signifique algo.

    Nada.

    Quizá por eso
    me hechizaba tu muerte, me aturdía
    su perfección,
    su antimilagro puro.

    (RAFAEL ESPEJO)

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  30. ENTRE DOS LUCES (Eloy Sánchez Rosillo)

    Caminar muy temprano,
    entre dos luces aún, en la mañana
    revuelta de febrero,
    por esta carretera ahora sin nadie.
    A mano izquierda, el mar,
    que es todavía parte de la noche,
    y que apenas se ve,
    confuso y encubierto por la bruma,
    pero del que se oyen
    el bronco respirar y los estruendos
    de sus arduos quehaceres invernales.
    Y a la derecha, al margen de mis pasos,
    en su milagro íntimo,
    el verde juvenil y tembloroso
    del trébol con rocío.

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  31. El problema de todo es la desempatía.

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  32. Enrique Bacigalupo25 de julio de 2021, 13:48

    ¿Parece menos temeroso aquel juicio,
    más miserecordioso el juez,
    si cada uno es de sí mismo
    acusador y acusado,
    y cielo e infierno?

    (KATHLEEN RAINE)

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  33. Te busco por la casa de la memoria
    pero también allí las habitaciones se desvanecen.

    (KATHLEEN RAINE)

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  34. Los de la ambulancia tocaron su frío
    cuerpo, lo subieron, pesado como el hierro,
    encima de la camilla, trataron de cerrar la
    boca, cerraron los ojos, ataron los
    brazos a los lados, desplazaron
    un mechón de pelo, como si les importara,
    vieron la forma de sus pechos, achatados por
    la gravedad, se la llevaron
    bajo la sábana, digamos,
    esaleras abajo

    Esos hombres nunca volvieron a ser los mismos. Más tarde
    se fueron, como siempre,
    a tomarse una copa o dos, solo que no podían
    mirarse a los ojos.

    Sus vidas dieron
    un vuelco, uno tenía pesadillas, extraños
    dolores, impotencia, depresión. Al otro no
    le gustaba su trabajo, su esposa se veía
    distinta, sus hijos. Incluso la muerte
    le parecía diferente-un lugar donde ella
    estaría esperando,

    y el otro se encontró a sí mismo, ahí parado, por la noche
    en el umbral del cuarto de dormir, escuchando
    a una mujer respirar, tan solo una mujer
    normal
    respirando.


    (SHARON OLDS)

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  35. Enrique Bacigalupo2 de agosto de 2021, 9:20

    Hoy estoy feliz con las sábanas de la vida.
    Lavé las sábanas.
    Tendí las sábanas y las vi
    aletear y elevarse como gaviotas.
    Cuando estuvieron secas las descolgué
    y hundí mi cabeza en ellas.
    Todo el oxígeno de la tierra en ellas.
    Todos los pies de todo los bebés del mundo en ellas.
    Todos los calzones de todos los ángeles del mundo en ellas.
    Todos los besos mañaneros de Filadelfia en ellas.
    Todos los juegos de saltar pintados sobre las aceras en ellas.
    Todos los caballitos hechos de trapo en ellas.

    Así que esto es la felicidad,
    ese agente viajero.

    (ANNE SEXTON)

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  36. Te busco por la casa de la memoria
    pero también allí las habitaciones se desvanecen.

    (KATHLEEN RAINE)

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  37. El futuro es una casa vacía, moradores sin rostro
    acudirán a su puerta con obsequios idénticos
    habitantes de humo y sueños malogrados.
    El futuro a la deriva todas las veces roto
    por un beso de alquitrán entregado a la muerte
    cada vez con la misma fuerza, nadie es capaz de detenerlo.
    El futuro afilado y brillante, paciente y frío
    abismo de asfalto duro y seco que no se deja sobornar.
    El futuro tiene voz de bosque
    está lleno de mensajes que obedecen al silencio
    no discute con el azar su precisión, su demora, débil armonía.
    El futuro entorpece la búsqueda
    el recorrido marcado se desvanece al amanecer
    como en un salto al vacío.
    El futuro no es posible sin profetas
    les comió la lengua el gato
    ni su silencio será suficiente
    cuando llegue la edad de la renuncia.

    (ISABEL BONO)

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  38. Enrique Bacigalupo6 de agosto de 2021, 22:31

    Dónde estará mi arrabal? Quién se llevó mi niñez?
    ¿En qué rincón luna mía volcás como entonces tu clara alegría?
    Veredas que yo pisé, malevos que ya no son.
    Bajo tu cielo de raso trasnocha un pedazo de mi corazón.

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  39. Seguramente había
    instalado en un rincón de su jardín
    un columpio
    y al ser hamacada en él
    veía por momentos
    por encima del cerco
    y mucho más allá
    veía ir y venir la vida
    como si en esos momentos
    entrara y saliera
    muy adentro
    de su cuerpo
    del mundo
    de su cuerpo
    del mundo
    como en un sueño
    o en un milagro
    fugaz
    e inolvidable.

    (ROBERT RIVAS)


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  40. Delia Elena San Marco (J.L. BORGES)


    Nos despedimos en una de las esquinas del Once.

    Desde la otra vereda volví a mirar; usted se había dado vuelta y me dijo adiós con la mano.

    Un río de vehículos y de gente corría entre nosotros; eran las cinco de una tarde cualquiera; cómo iba yo a saber que aquel río era el triste Aqueronte, el insuperable.

    Ya no nos vimos y un año después usted había muerto.

    Y ahora yo busco esa memoria y la miro y pienso que era falsa y que detrás de la despedida trivial estaba la infinita separación.

    Anoche no salí después de comer y releí, para comprender estas cosas, la última enseñanza que Platón pone en boca de su maestro. Leí que el alma puede huir cuando muere la carne.

    Y ahora no sé si la verdad está en la aciaga interpretación ulterior o en la despedida inocente.

    Porque si no mueren las almas, está muy bien que en sus despedidas no haya énfasis.

    Decirse adiós es negar la separación, es decir: Hoy jugamos a separarnos pero nos veremos mañana. Los hombres inventaron el adiós porque se saben de algún modo inmortales, aunque se juzguen contingentes y efímeros.

    Delia: alguna vez anudaremos ¿junto a qué río? este diálogo incierto y nos preguntaremos si alguna vez, en una ciudad que se perdía en una llanura, fuimos Borges y Delia.

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  41. NO ARROJES LEJOS DE TI AL HÉROE QUE LLEVAS DENTRO.

    (Nietzsche)

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  42. Después de que te fuiste

    la luna vino y brilló

    en la ventana vacía.

    Pensé en ti como en una flor

    arrastrada por el viento,

    que siguió su camino

    y que nunca podrá regresar.


    (SHU CH'I-SIANG)

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  43. Tu futuro se eleva en línea recta.
    Se esfuma en el horizonte como un pájaro.
    El mío se queda aquí.
    Contra el ventanal del aeropuerto
    que rozo con la punta de la nariz.
    Sé lo que me corresponde
    en el próximo episodio
    de nuestra historia de amor:
    fundirme a la ausencia para embellecerte
    y recorrer la ciudad
    convertida en los pasillos
    de una inmensa sala de espera
    donde se escucha:
    PASAJEROS DE LO PASAJERO,
    FAVOR PASAR A BORDO.

    (JOHN GALÁN CASANOVA)

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  44. Ni sé bien si soy yo quien en mí siente.

    (PESSOA)

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  45. Mis manos
    -dos mundos,
    con líneas rectas y curvas
    de ríos, montañas y valles
    a través de hondonadas cada vez más estrechas,
    talladas a lo largo de miles de años-,
    mi destino fluye como un agua desconocida y triste
    a veces hacia ti,
    a veces de ti,
    y a veces hacia un objetivo desconocido y remoto.
    Las diez medias lunas de un rosa muy pálido
    nunca están apagadas
    sobre las olas temblorosas de mi sangre
    y como testigos eternos, guardan
    el dulce secreto de las yemas de mis dedos.
    Y si en ocasiones en el abismo del tiempo
    los mundos separados de nuestras manos se encuentran,
    inmóviles y tranquilas,
    confusas por una alegría demasiado repentina,
    los dos soles rojos se quedan un momento en nuestra carne.

    (ROKHL KORN)

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  46. Enrique Bacigalupo25 de agosto de 2021, 14:39

    Se te fue de la mano
    lo soltaste.
    Era un pequeño amor
    pero era nuestro
    y a lo lejos
    se hace herida nocturna.
    Cicatriz de horizonte que crece.

    (ALICIA MARINA ROSSI)

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  47. En cuanto ella me de soslayo miró
    bajó la vista y yo también en cuanto
    la miré bajé los ojos
    Llegó el mozo e un vaso de vino pedí, ella
    pidió no sé.
    Entonces nos miramos pero sin saludo,
    como a distancia de tres mesas, mudos
    como correspondía. ¿Y? Bueno,
    para qué.
    Tomé un trago y en cuanto
    hacía frío de tiempo lógico
    salí de haberla visto haciéndome el duro,
    esforzándome para no renguear.

    (JORGE LEÓNIDAS ESCUDERO)

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  48. el rojo fuego es la mañana

    violeta el mediodía

    amarillo el día se acaba

    y después de eso nada

    salvo miles de chispas al ocaso

    revelan la anchura que ardió

    el territorio de plata que

    nunca -aún- se consumió


    (EMILY DICKINSON)

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  49. Si te vas, sé feliz. Y no pienses que es sólo
    un generoso impulso quien dicta estas palabras,
    o el viejo afecto, vivo todavía:
    también es el orgullo.
    Que la dicha nos sea preferida
    es triste, nada más. Pero que el tedio,
    la grisura, el cansancio,
    aparezcan también mejores que nosotros
    a los ojos de aquel a quien amamos,
    que prefiera su carga a nuestro alivio…
    También por egoísmo, ya lo ves: si es que puedes,
    por favor, sé feliz.

    (JOSÉ CEREIJO)

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  50. Cuando me muera, que arrastren las latas

    Vengan los saltos y los mitotes

    Hagan estallar en el aire los chicotes,

    ¡Llamen a payasos y a acróbatas!


    Que mi cajón vaya sobre un burro

    adornado, enjaezado a la andaluza...

    A un muerto nada se le rehúsa:

    ¡Yo deseo con fuerza ir en un burro!


    (Mário de Sá-Carneiro)

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  51. Un número de esquemas limitado:
    ojos así, labios así, distintos tipos
    de dientes, de nariz, los pómulos salientes,
    las mejillas
    un tanto regordetas, los lunares,
    el pelo lacio, crespo, rojo u ondulado
    y todas las variables que siempre se repiten,
    que introducen
    ligeras variaciones que ya vimos
    en otros rostros, otros días.
    Quiero decir que con muy poco se hace mucho,
    que alguna forma es la correcta,
    alguna se parece vaya a saber por qué
    a aquella que buscamos. Por ejemplo,
    ahora estás dormida.

    (JORGE FONDEBRIDER)

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  52. EL TAXI

    Cuando me aparto de ti
    el mundo queda mudo
    como un tambor que se afloja.
    Yo te llamo entre las resaltadas estrellas
    y grito entre los desfiladeros del viento
    para herirme en los filos de la noche.
    Las calles que corren rápidas
    unas detrás de otras
    me van separando de ti,
    y las luces de la ciudad me punzan los ojos
    de modo que ya no puedo ver tu rostro.
    ¿Por qué dejarte a ti
    para herirme en los filos de la noche?

    (Amy Lowell)

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